miércoles, 3 de noviembre de 2010

Cosa de locos

La locura de los locos reside en no distinguir entre el sueño y la realidad, la realidad y la fantasía, la fantasía y la ilusión. El momento en que te dicen "Acción" lo desconocen, y los horarios se les alteran, no comprenden la relación entre publico y solitario. El más calmo de los instantes los oyen, no los ven, los sienten adentro, desde la segunda capa de piel hacia el interior, bien profundo. Donde nadie se da cuenta -ellos oyen-, sólo pueden ver sus ojos un tanto desorbitados, pero no se dan cuenta. Altas horas de la noche para ese ser, resignifican su existir. Ahora que todo está un tanto más claro es posible realizar cualquier acción, hasta las imposibles inconscientemente! Es genial ese momento de plenitud absoluta, conexión sideral. Sólo hace falta que haya sol en medio de la noche y que nadie se de cuenta mientras agarras las tijeras.    


Limitándome a deshollinar...


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