martes, 17 de septiembre de 2013

Tan atentos a que nada sucediera...

Tantas cuentas pendientes y tan poco tiempo. 
Tanta perfección que molesta.
Tanto desorden que desestabiliza.
Tantas sorpresas que no deberían serlo.
Tantos cumpleaños que se escapan del calendario.
Tantas horas y tan poco operativas.
Tantas ganas de dormir una gran siesta.
Que suerte que todavía me quedan tantos de tus abrazos.