Escucho esta obra y me imagino la casa de la abuela, pero no la mía, otra que no conozco. Veo el sonido recorriendo los pasillos de cerámicos de granito atrapados por dos paredes repletas de cuadros y espejos predispuestos de manera irregular. Un pasillo largo que no deja ver el final, todo en penumbra, una luz ceniza envuelve el ambiente. La música proviene de una de las puertas que lo atraviesa. Semi entornada deja entrever un sillón forrado con tela estampada de flores, arriba de una mesita una lámpara de escritorio que ilumina el accionar del ejecutor: un viejo toca-discos cubierto por una fina capa de polvo...
lunes, 23 de enero de 2012
jueves, 19 de enero de 2012
Volver a casa
Si viajar es algo hermoso e inexplicable ni te cuento lo que es volver a casa. Que uno disfrute el volver a casa no implica que lo haya pasado mal ni que no hubiera querido quedarse unos cuantos días más, aclaro. Es sólo que el regreso al hogar tiene un nosequé que hace que me den ganas de saltar y sonreír sin razón aparente. Supongo que será por ese instante en el que uno abre la puerta y sabe lo que va a estar detrás pero a la vez se encuentra expectante, o ese llegar y que te reciba tu gente. Quizás tus cosas, no porque sea materialista pero por algo son de uno, ese sentido de pertenencia que indica qué es de uno y porqué, los olores, las formas, los colores. Ese abrazo que se espera al llegar, el más hermoso premio, el reencuentro.
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